Cómo la vista puede «saborear» tu comida antes de que la pruebes.
La #neurogastronomía ha sido una ventana a un mundo fascinante que combina la ciencia del cerebro con el arte culinario. Aunque muchos factores influyen en cómo disfrutamos de nuestra comida, la vista es indiscutiblemente crucial.
¿Por qué es tan vital lo que vemos en nuestro plato?
Nuestro cerebro, a través de la vista, ya ha decidido en gran medida si algo será delicioso o no mucho antes de que lo probemos. No es simplemente sobre estética; es una interacción compleja y hermosa que juega con nuestras emociones, memorias y expectativas.
Bien, esto va más allá del simple dicho «comemos con los ojos». Los investigadores han descubierto que nuestro cerebro se activa de manera diferente dependiendo de cómo se presenta el plato.
Engañando al Cerebro a través de la Vista
Si todavía no me crees, te presento a Facundo Manes, un neurocientífico que se ha sumergido en la intersección de la gastronomía con la neurociencia. Hace poco, se embarcó en un proyecto con el legendario Ferran Adrià, del elBulli Lab, en una iniciativa que ellos llamaron «La Gastronomía de vanguardia y la belleza del engaño». A simple vista, servían una aceituna. Pero, oh sorpresa, en realidad era una esfera verde con sabor a cítrico.
Imagínate la explosión de sorpresa en tu boca. Todo esto, gracias a la maestría de jugar con lo que esperas y lo que realmente experimentas.
Ahora dime, ¿te sientes atraído por los colores de los platos cuando comes? No es casualidad. Resulta que Ferran Adrià, la Fundació Alicia y Charles Spence, otro neurocientífico top de Oxford, han descubierto algo sorprendente. Sirve una mousse de fresa en un plato blanco y otro en un plato negro. ¿Cuál crees que sabe más dulce?
El Poder Emocional de la Vista
Los alimentos no son simplemente contenedores de nutrientes; también evocan emociones y recuerdos. La vista, al interpretar visualmente un plato, puede despertar emociones positivas o negativas, que influyen en la experiencia general de comer.
Toni Massanés, de la Fundación Alícia, resalta la importancia de este aspecto al mencionar que los cambios en texturas y colores pueden atraer la atención de ciertos grupos, como los ancianos o los enfermos, que pueden haber perdido el apetito.
¿Por qué te digo todo esto? Porque, la comida no es solo nutrición, es una experiencia que juega con todos tus sentidos, especialmente con tu vista.
Y si eres de los que busca siempre una experiencia gastronómica única, debes saber que todo parte desde tu cerebro, desde cómo percibes visualmente lo que vas a comer.
Entonces, la próxima vez que te encuentres en un restaurante o incluso preparando una comida en casa, pregúntate: ¿Estoy listo para sorprender a mi cerebro hoy? Porque cada plato, cada color, cada forma, está esperando para ofrecerte una experiencia que jamás olvidarás.
Entender la conexión entre el cerebro, los ojos y la comida puede ofrecerte una experiencia gastronómica completamente nueva y enriquecedora.
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En Neurobites, queremos descubrir los secretos entre la cocina y el cerebro.
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